¡Qué pareja tan encantadora!. Su historia de amor surgió porque los dos son profesores y trabajan en el mismo colegio y allí es donde se conocieron.
Cuando hablamos de hacer la sesión de preboda les pregunté por el sitio donde se conocieron. «Nos conocimos en el colegio», me contestaron. Entonces ¿qué mejor que hacer las fotos de la sesión preboda allí?.
La boda fué una fiesta de niños mezclados con sus profesores. Y ahí es cuando te das cuenta de que la gente menuda está con sus maestros y de cómo los aprecian.
Con la novia disfruté disparando, ya que es de esas personas que son muy expresivas al comunicarse y tuve la oportunidad de captar emociones muy bonitas durante la boda. Al final, todos contentos. Muy agradecido porque a parte de disfrutar de las sesiones, de la familia y de sus amigos, todos quedaron encantados con el resultado. Asi que, ¡qué más se puede pedir!.
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